En teoría podemos hackear el mac-mini pero hace falta una espátula de calidad

Cómo ampliar la RAM de un Mac Mini y no morir en el intento

Por 92 euros me he hecho con un módulo de RAM de 1GB Kingston DDR PC3200 que ha ido a parar a las tripas del Mac Mini. Para poder obtener los beneficios de trabajar con varias aplicaciones abiertas a la vez que se ejecuta el Warcraft III hay que pasarlo mal. Muy mal.Antes de ponerme a la tarea, me leí y releí un tutorial que encontré en Macuarium que explica paso a paso como ampliar la RAM del Mac Mini (ojo, que para descargarlo hay que estar registrado). Así que me hice con dos espátulas de acero de 6cm en el Leroy Merlín (a 0,80 euros cada una, las más baratas), herramientas necesarias para poder abrirlo. Un paño encima de la mesa para no rallar la superficie blanca inmaculada del mac, las espátulas, el módulo de RAM, y yo acojonado cual carnicero cuchillo en mano a punto de abrir esa obra de ofebrería.Empecé limando un poco la espátula con una lima, cosa que creo que no sirvió de mucho, pero por lo menos limpió la superficie. Le dí la vuelta al mac, y comencé introduciendo la espátula por uno de los laterales. Es imposible meter la espátula sin dañar aunque sea un poco el plástico. Conseguí introducirla hasta que llegó al tope (unos 7mm), y empecé a hacer palanca. Había leido que hace crujiditos y “clacks”. Yo no escuché ningún “clack” pero sí escuché como eso empezaba a retorcerse en forma de crujido constante. Cuando consigues soltar las pestañas, salen de golpe. Imposible hacerlo suave, una vez haces fuerza la espátula sale disparada hacia arriba y escuchas el “clack” de verdad. Conseguí abrirlo de un lado, y cuando fui a meter la espátula en el otro, no había hueco. Solución: ambas espátulas a la vez. Con un poco de maña, y dañar un poco el plástico, las dos espátulas entraron, hice palanca a la vez con las dos, y triunfalmente abrí el mac. Sacar completamente la carcasa fue cosa de niños.

Creía que el cambio de ram iba a ser sencillo, pero es que una de las pestañas que liberan el módulo de RAM choca contra la carcasa de metal. En un principió pensé que era imposible quitar el módulo. Me equivocaba. Hice palanca en un lateral del módulo con un destornillador y este salió sin aplicar mucha fuerza. Metí el nuevo módulo, probé el mac con la carcasa abierta… todo correcto. Sólo faltaba cerrarlo.

Y aquí vino la parte más difícl de todas. Aseguro que cerrar el Mac Mini es infinitamente más doloroso que abrirlo. Hay que hacer fuerza para cerrarlo, y aquí si que suena de verdad. Pero lo más chungo es que es imposible cerrarlo sin ajustar antes unas pestañas de metal que hay en la parte trasera, justo encima del plástico blanco. Cerré y abrí el mac unas 7 veces sin éxito, hasta que descubrí que no cerraba del todo por culpa de esas pestañas, que deberían enganchar por encima de la carcasa superior. Así que enderecé esta vez las pestañas de metal con un destornillador y conseguí cerrarlo.

El aumento de rendimiento es considerable, porque liberas en gran medida el uso de la swap, realizando muchos menos accesos al lento disco duro. Adios a la pelota de playa giratoria.

Fuente: http://fuerteventura.ls.fi.upm.es/~anunez/?p=45